El otro día repasábamos cuándo se había realizado el primer seguro de coches de la historia. La versión que parece más acertada y en la que muchos parecen coincidir es que se realizó el primero de febrero de 1898, otorgada por la compañía de seguros "Travellers Insurance" al Doctor Truman J. Martin de Buffalo, Nueva York, Estados Unidos por tan sólo (aunque en ese momento era una suma considerable de dinero) $12,25 dólares.
Con el paso del tiempo, ya comenzado el frenético siglo XX la predominancia de los caballos y carretas a tracción de sangre dieron paso a los novedosos e increíbles autos motorizados. Se crearon nuevas fabricas, nuevos puestos de trabajo, más gente capacitada se volcó a la invención de motores sobre cuatro ruedas, se crearon carreras especiales a lo largo y ancho del mundo.
Alemania, Estados Unidos, Inglaterra, Italia y Francia fueron los principales países en desarrollar y perfeccionar la industria automotriz tanto en sus comienzos como en la actualidad. Se sumarían también Holanda y España, entre otros, en la competencia por liderar un gran mercado con una inmensa demanda en crecimiento.
Esta demanda pronto se fue cubriendo con la creciente oferta y variedad, junto a la constante evolución y mejoras de todas las características del mundo automotor. Cada vez más gente alrededor del planeta fue adquiriendo coches. Lamentablemente al mismo tiempo comenzaron a ser frecuentes los accidentes con ellos.
Fue entonces que frente a la cantidad en constante aumento de heridos y accidentes fatales fue necesario a su vez contratar seguros para coches específicamente y que cubran distintos aspectos a considerar en los accidentes de tránsito.
Fue recién para el año 1927, en Massachusetts, Estados Unidos, en donde se demandó la legalidad del uso obligatorio de un seguro para autos. Comenzando así una tendencia que pronto se iría expandiendo a través del país y el resto del mundo. Ya entrados en la mitad del siglo era un requerimiento en la mayoría de los países civilizados o con gran cantidad de vehículos.
Cabe mencionar también que otras industrias e invenciones acompañaron al crecimiento automovilístico. Por ejemplo, para el año 1909 Bocklenberg & Motto, una empresa alemana de la ciudad de Elberfeld, comenzó a fabricar y abastecer con cerraduras a la industria automotriz. Cubriendo así una necesidad que hoy nos resulta básica.
Lo mismo ocurrió con los componentes de seguridad y otros, principalmente a medida que los nuevos modelos de autos alcanzaban mayores velocidades. Convirtiéndose así en vehículos más riesgosos para la vida de los seres humanos. Para lo cual las compañías de seguros debieron saber adaptarse junto con la industria.
Continuar leyendo ►
Con el paso del tiempo, ya comenzado el frenético siglo XX la predominancia de los caballos y carretas a tracción de sangre dieron paso a los novedosos e increíbles autos motorizados. Se crearon nuevas fabricas, nuevos puestos de trabajo, más gente capacitada se volcó a la invención de motores sobre cuatro ruedas, se crearon carreras especiales a lo largo y ancho del mundo.
Alemania, Estados Unidos, Inglaterra, Italia y Francia fueron los principales países en desarrollar y perfeccionar la industria automotriz tanto en sus comienzos como en la actualidad. Se sumarían también Holanda y España, entre otros, en la competencia por liderar un gran mercado con una inmensa demanda en crecimiento.
Esta demanda pronto se fue cubriendo con la creciente oferta y variedad, junto a la constante evolución y mejoras de todas las características del mundo automotor. Cada vez más gente alrededor del planeta fue adquiriendo coches. Lamentablemente al mismo tiempo comenzaron a ser frecuentes los accidentes con ellos.
Fue entonces que frente a la cantidad en constante aumento de heridos y accidentes fatales fue necesario a su vez contratar seguros para coches específicamente y que cubran distintos aspectos a considerar en los accidentes de tránsito.
Fue recién para el año 1927, en Massachusetts, Estados Unidos, en donde se demandó la legalidad del uso obligatorio de un seguro para autos. Comenzando así una tendencia que pronto se iría expandiendo a través del país y el resto del mundo. Ya entrados en la mitad del siglo era un requerimiento en la mayoría de los países civilizados o con gran cantidad de vehículos.
Cabe mencionar también que otras industrias e invenciones acompañaron al crecimiento automovilístico. Por ejemplo, para el año 1909 Bocklenberg & Motto, una empresa alemana de la ciudad de Elberfeld, comenzó a fabricar y abastecer con cerraduras a la industria automotriz. Cubriendo así una necesidad que hoy nos resulta básica.
Lo mismo ocurrió con los componentes de seguridad y otros, principalmente a medida que los nuevos modelos de autos alcanzaban mayores velocidades. Convirtiéndose así en vehículos más riesgosos para la vida de los seres humanos. Para lo cual las compañías de seguros debieron saber adaptarse junto con la industria.